Encontrarás original Ruta de las Caras en pleno pantano de Buendía, entre las provincias de Guadalajara y Cuenca, a aproximadamente hora y media de Madrid.
La sorprendente Ruta de las Caras se sitúa en una pequeña península muy cerca de la localidad de Buendía (Cuenca).
Este curioso espacio consiste en una serie de esculturas (caras la mayoría de ellas), que se han hecho en la roca arenisca de la zona, junto al pantano. Sin duda localización muy acertada donde disfrutar del arte en plena naturaleza.
La verdad que es un plan interesante cerca de Madrid y apto para todos los públicos.
Ruta de las Caras de Buendía
Se trata de una pequeña ruta de aproximadamente un kilómetro y medio (1.5 km). Sin apenas dificultad y bien adecuada para los visitantes.
Es una ruta corta y entretenida. Sin desnivel y con árboles. Muy aconsejable para ir con niños.
Hay aparcamiento justo en la entrada, donde además hay algunas mesas para comer y bancos para descansar. El acceso es gratuito. Es esta web podrás ver el folleto oficial de la Ruta de las Caras.
Las primeras caras de Buendía comenzaron a esculpirse en 1992, y desde entonces se han ido añadiendo otras hasta las 19 esculturas que hay día de hoy.
Las caras tienen un tamaño desde los 70 centímetros hasta los 4 metros de altura.
Encuentra aquí la ruta de las caras en google maps.
Caras que más nos gustaron
Desde luego los más llamativos y que habíamos visto más veces en fotografías son «Los Budas» (3, 4 y 5 en el mapa). Son de los que tienen más tamaño y están muy juntos entre sí. Además destacan por ser algo que no es tradicional de esta zona del mundo.
Son 3 esculturas: Krishna, Maitreya y Arjuna. La primera casi alcanza los 4 metros de altura.
Continuamos el paseo y seguimos viendo algunas de las esculturas del entorno. También verás que hay muchas inscripciones de personas en la roca y que algunos tratan de hacer sus propias creaciones. Por favor, recuerda dejar la zona limpia y no tirar basura al suelo para mantener el entorno cuidado. Recuerda que la Ruta de las Caras es un espacio natural.
A mi me gustó mucho el llamado «Chemari», es grande y original. No sabría decir cuál es su significado, ni distinguir si es un gigante, un gnomo o un duende, pero me gustó. Tiene más de 2 metros de altura.
La escultura de Beethoven es de mucho menor tamaño, aproximadamente 1 metro de altura. Según se sigue el camino, bajando hacia el pantano, puede pasar un poco desapercibida. Esta es bastante chula sobretodo por el pelo del personaje.
Algo parecido les ocurre a «los duendes» que la verdad nos costó bastante encontrar por su situación y por su tamaño.
Ya muy cerca del pantano de Buendía, siguiendo la ruta de la caras, distinguirás en lo alto de una roca a «De Muerte» una calavera que vigila el camino y que da la espalda al embalse. Detrás de ella puedes tener una buena panorámica del pantano.
Se puede subir hasta la escultura, por detrás es más fácil hacerlo. Por detrás también hay otra cara, en este caso se trata de la Dama de Pantano.
La Ruta de las Caras de Buendía continua un poco más para ver las últimas tres esculturas (dos de ellas vírgenes) y de ahí vuelve al inicio. Es una ruta circular muy fácil.
Más que ver en Buendía
La ruta de las caras es una zona buena para pasar un tiempo, sobretodo si quieres acercarte un poco más al pantano. Incluso puedes darte un baño si te apetece (y te lo permite el coronavirus).
Si la ruta te parece corta (que lo es) pues hacer lo que hicimos nosotros. Aparcamos en la localidad de Buendía y fuimos caminando hasta la Ruta de las Caras. Esto son alrededor de 10 kilómetros ida y vuelta. El camino no está mal, aunque no hay mucha sombra hasta llegar a las caras.
Visitar Buendía también es recomendable. Te recomendamos llegar hasta la plaza del pueblo, con el ayuntamiento y la iglesia (Parroquia de la Asunción) así como buscar restos de la muralla que rodeaba la localidad.
Toda la zona es un espacio natural muy bonito. Seguro que puedes disfrutar un buen día con este plan alternativo cerca de Madrid.
Incluso si dispones de tiempo te puedes aventurar a disfrutar también de la Ciudad Encantada de Cuenca.
